Folies Bergère
Las Folies Bergère (“Bergère” sin “s”, porque se trata de las Folies, o salas de espectáculos, de la rue Bergère): un nombre que evoca desde hace más de dos siglos uno de los más prestigiosos music-halls del mundo, pues fue en el Folies Bergère donde nació la primera revista de music-hall en el siglo XIX. Dedicadas a la diversión, les Folies Bergère se convirtieron en el modelo de este género.Este lugar, inaugurado la víspera de la guerra de 1870, ha visto actuar, desde la Belle Époque hasta hoy, a todas las estrellas de un arte difícil y popular, de toda la música y de todas las modas que marcaron un siglo rico en transformaciones y cambios radicales.
Fueron Mistinguett, Maurice Chevalier, Joséphine Baker, Charles Trenet, Fernandel o Jean Gabin quienes inmortalizaron en el pasado el escenario del Folies Bergère, así como las revistas Folie je t'adore, Folies de Paris y Folies en folie. A partir de los años 90, el estilo se revisó y se orientó hacia la comedia musical con Fame en 1998, en particular, y más recientemente con Danse Sing.
Les Folies Bergère, que han inspirado a pintores y novelistas, representa un lugar mítico e inolvidable.