Obelisco de la Plaza de la Concordia
La Plaza de la Concordia es una de las plazas más grandes y famosas de París. Está situada en el centro de la ciudad, entre la avenida de los Campos Elíseos y el Jardín de las Tullerías, y mide aproximadamente 8,6 hectáreas. La plaza es el resultado de numerosas transformaciones a lo largo de los siglos y tiene una historia fascinante.
En 1795, tras el final del Terror, la plaza pasó a llamarse Place de la Concorde. El gobierno decidió instalar dos fuentes monumentales, el Obelisco de Luxor y ocho estatuas que representaban a las ciudades de Francia. Las fuentes fueron diseñadas por Jacques Ignace Hittorff, arquitecto alemán, mientras que el Obelisco fue regalado a Francia por el Virrey de Egipto en 1829.
Hoy en día, la plaza de la Concordia es una de las principales atracciones turísticas de París. Las dos fuentes monumentales de la plaza son especialmente impresionantes, con sus esculturas de delfines y caballitos de mar. El Obelisco de Luxor, de 23 metros de altura, es también un elemento destacado de la plaza. Fue erigido en la plaza en 1836 y actualmente se considera un símbolo de la amistad franco-egipcia.
La plaza también es conocida por su espectacular arquitectura. Los edificios que la rodean son impresionantes, especialmente el Hôtel de Crillon, del siglo XVIII, uno de los hoteles más lujosos de la ciudad. La plaza también está bordeada de jardines, que ofrecen un descanso verde del ajetreo de la ciudad.
La plaza de la Concordia se utiliza a menudo para actos públicos y manifestaciones. Ha sido escenario de numerosos acontecimientos históricos, como el desfile del 14 de julio, los días festivos franceses y actos políticos y culturales. La plaza es también un lugar de encuentro para los parisinos, que acuden a pasear, hacer fotos y disfrutar del animado ambiente.