Plaza de la Bastilla
La plaza de la Bastilla es una de las más famosas de París. Está situada en el distrito 11 y tiene una historia rica y llena de acontecimientos. Esta plaza es el símbolo de la Revolución Francesa y de la lucha por la libertad.
La plaza debe su nombre a la prisión de la Bastilla, que se encontraba en el emplazamiento de la actual plaza de la Bastilla. La prisión fue destruida durante la Revolución Francesa en 1789, acontecimiento que marcó el inicio de la caída de la monarquía francesa. La plaza se construyó sobre las ruinas de la prisión de la Bastilla.
La plaza de la Bastilla es un lugar emblemático de la lucha por la libertad y la democracia. Ha sido escenario de numerosos acontecimientos históricos, entre ellos los disturbios de 1830, que provocaron la caída del rey Carlos X y la ascensión de Luis Felipe, rey de los franceses. La plaza fue también el punto de partida de la revuelta de los parisinos durante la Comuna de París de 1871, un intento de crear un gobierno revolucionario en la ciudad.
En el centro de la plaza se encuentra la Columna de Julio, monumento a las víctimas de los disturbios de 1830. La columna, de 52 metros de altura, está coronada por un genio alado que simboliza la libertad. La columna está rodeada por una fuente, especialmente impresionante por la noche, cuando las luces de la ciudad se reflejan en el agua.
Por último, la plaza de la Bastilla es un lugar de encuentro para los parisinos durante los grandes acontecimientos. Ha sido escenario de numerosas reuniones políticas y culturales, así como de conciertos y acontecimientos deportivos. Las celebraciones del 14 de julio, día festivo en Francia, suelen comenzar con un desfile por la plaza.
En conclusión, la plaza de la Bastilla es un lugar emblemático de París, conocido por su historia, su arquitectura y su animado ambiente. Es un símbolo de la lucha por la libertad y la democracia, así como de la cultura alternativa parisina.